Pero el Ejército ruso había actuado bastante bien contra los franceses. Kutusov se había impuesto a la avanzadilla francesa en Amstetten un mes antes, y el general Peter Bagration (1765-1812) mantuvo acorraladas a las fuerzas superiores francesas en Hollabrun durante la retirada en Moravia. Los generales rusos no carecieron de sangre fría, pero hubo desacuerdos entre ellos durante la acción. Kutusov aconsejaba cautela. Prefería que el zar esperara a los prusianos para entrar en Bohemia. Alejandro y los generales Franz von Weyrother (1755-1806), conde von Buxhowden (1750-1811) y Bagration exponían que la situación permitía la ofensiva. Había pocas razones para esperar. Superaban a Napoleón en número, y si se podía alejar de Viena su flanco estratégico, seria atrapado. El destino de Mack bien podía ser también el de los franceses. El 1 de diciembre el ejército aliado tomo posiciones en los montes de Pratzen y vigilaban al Ejército francés, que se encontraba debajo. Al norte de los montes estaba el camino principal del oeste hacia Olmütz, cuartel general de Napoleón. Al sur, los lagos helados protegían el flanco y al oeste corría el arroyo Goldbach. Desde lo alto los aliados observaron el despliegue de Napoleón y calcularon con seguridad su aparente debilidad. El Ejército francés estaba colocado al frente, a lo largo de 6,5 km, con el IV Cuerpo del mariscal Nicolas Soult defendiendo dos terceras partes de la línea. De las tres divisiones de Soult, la del general Claude Legrand (1762-1815) ocupaba el Goldbach desde Telnitz a Kobelnitz, en un frente de unos 3,2 km, interrumpido únicamente por el castillo Sokolnitz y dos estanques. El volumen del Ejército francés, unos 45.000 hombres, estaba concentrado en el flanco izquierdo, bloqueando el camino de Olmütz y al sur. Allí situó Napoleón al intrépido V Cuerpo del mariscal Jean Lannes (1769-1809), en primera línea, con el I Cuerpo de Bernadotte, la división de granaderos del general Nicolas Oudinot (1767-1847), la Guardia Imperial y la Reserva de Caballería presionando en un espacio de no mas de 4 km2. El general Weyrother, jefe del Estado Mayor de Alejandro, llego a la conclusión de que el despliegue aparentemente defectuoso dejaba a su ejército vulnerable a un ataque de flanco a lo largo del arroyo Goldbach. El ejército aliado, dividió en cinco columnas, avanzaría a lo largo del frente y tres columnas caerían sobre el flanco derecho francés entre Telnitz y Sokolnitz. Resumiendo, 40.000rusos avanzarían sobre menos de 10.000 franceses. La caída del flanco derecho de Napoleón obligaría al emperador a negarse a que su flanco se alejara de Viena y después aislarían a su ejército, haciéndole retroceder hasta Olmütz.
O al menos esto pensaba que pasaría.
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